El 19 se realizó en el Cerro Cochicó un Acto en Memoria del Cacique José Gregorio Yankamil. Un acto que desde sus preparativos muy temprano, comenzó a sentirse algo distinto a otros actos.

La presencia del Ministerio de Educación a través de la Dirección de Educación Intercultural Bilingüe; de la Secretaría de Cultura, con el Coordinador del Consejo Provincial del Aborigen; de los Intendentes de La Humada y Algarrobo del Águila; autoridades Nacionales y adhesiones Educativas, Culturales y Turísticas de 25 de Mayo y Chos Malal; la Escuela Hogar nº 157 y el Colegio Secundario “Jorge Walter Martínez Almudevar” locales. Todos con sus Directivos y Abanderada/os. Lonkos Ranqueles y werkenes. Nos permite pensar que Gregorio, después de 140 años de haber pensado en el pasado y en el posible futuro, con la presencia de su bisnieto y su tataranieto, con un mensaje que marca, también, qué queremos con la Memoria de Nuestros Héroes. Nos Habla de esa Interculturalidad que él vivió en el Siglo XIX y el XX nos la quitó.

No se puede Interpretar, menos cambiar, a una Cultura Originaria desde lo Educativo sin ella Adentro.

Ana Lucía D’Emilio decía en el VIII Congreso Latinoamericano de EIB, entre otras apreciaciones “…Finalmente, y esto lo vemos en varios países, lo intercultural muchas veces es el acercamiento a lo indígena, pero a lo y a los que no tienen: a los que no tienen la tierra, a los que son pobres, a los que no tienen trabajo. Sin embargo, un acercamiento de educación intercultural debería ser un poco más, debería apuntar a lo que tienen. Y lo que tienen es una gran riqueza, una gran capacidad de conocer el medio ambiente, toda una visión del mundo que es diferente y que nos puede dar muchísimo en términos de una mejor comprensión de relacionamiento entre nosotros y también entre nosotros y el medio ambiente.”

A su turno, en ese Congreso, Germán Canuhé no sólo adhirió a lo manifestado por la representante de UNICEF, sino que expresó: “…Pertenezco al Pueblo Ranquel, que fue el que más sufrió la mal llamada conquista, a punto tal que nuestros padres y nuestros abuelos nos decían: “No hables de nuestra tierra, porque te matan. Tampoco nuestro idioma”, y la mayoría seguimos ese consejo. Por suerte hubo un grupo que mantuvo firme sus convicciones, su idioma, y gracias a ellos, cien años después, nosotros retornamos para volver a comenzar…”.

Demás está decir que hemos sentido la presencia del Pueblo Ranquel, aquí, en este Cerro. Principalmente la de aquellos que no pudieron llegar y son referentes importantes para el Pueblo. Por aquí escaparon y volvieron familiares de Carripilún, Llanquetruz, Pichuiñ, Mariano Rosas, Yancamil, Epumer Rosas, Baigorrita y de quien guiaba a los descendientes de los Zorros (Gner) el capitanejo Marillan. Muchos de ellos fueron tomados prisioneros al Norte de Neuquén.

Que este emotivo Homenaje a uno de los importantes, sino el más trascendente del final de la conquista, como lo fue el Cacique José Gregorio Yankamil, nos permita ver reflejado en el sistema educativo, esta parte fundamental de la Historia Rankülche. De ahí en más, 100 años de Silencio.

Gracias al Grupo de Danza “El Jarillal” dirigido por el Prof. Diego Martínez, y lamentamos no haber podido contar con el grupo de niñas/os por falta de movilidad. Porque en ellos, están esos cambios de los que hablamos. Al cantautor Claudio Ramírez, por sus interpretaciones, muchas gracias.

Agradecemos al personal municipal que tuvo a su cargo toda la logística y por sobre todo, preparar los alimento que allí se disfrutaron. Gracias. ((M.P))

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *